En el mundo aun existe mucha gente que valora las tradiciones ancestrales, que busca preservar ciertos valores y sobre todo, mantener ciertos estándares, como si esto fuese a durar para siempre.
Este tipo de acciones son muy loables, pero me he puesto a pensar que mucha de esa conservación de tradiciones, festividades, etc, en sus formas "puras", quedan relegadas a curiosidades de museo, a documentales, y a artículos escritos.
¿Y por qué? Porque la humanidad no es estática, es dinámica. Somos seres de cambios, sean buenos, malos, a veces cambios hacia algo nuevo, a veces hacia regresiones. Digamos que se trata de defender el catolicismo. Sin embargo, ¿cuál de todos los catolicismos? ¿El de qué país? ¿Su forma pura? ¿Existe acaso?
Por poner un ejemplo, el catolicismo mexicano. ¿No tiene acaso muchos ritos prehispánicos adaptados y embebidos dentro de sí mismo? Es decir que ya no es puro. Sin embargo es parte de una cultura, es una especie de identidad.
Se dice que el ·"jalogüin" es una invasión a nuestras costumbres, que está desplazando al día de muertos original. Sin embargo puede ser esta una demostración más de la naturaleza humana de adaptar y cambiar ciertos hábitos, costumbres o demás dependiendo del entorno en el que se viva. Es cierto que vemos conscientemente las "invasiones" a la idiosincrasia cultural de la nación, pero quizás hay otras que pasamos por alto, y de ellas no nos quejamos. ¿Qué nombres están de moda para los niños hoy en día? Bryan, Karen, Jonathan, Jennifer, etc, etc, etc...¿Cuál es su origen? ¿Es mexicano? ¿No hemos conocido a un "brayan" con cara de Chimalpopoca o Nicanor? Y de esto no nos quejamos, y lo adoptamos como si fuese parte de nuestra cultura, así como de Big brothers, reality shows de bailongos (creemos que el concepto lo inventaron las televisoras nacionales pero por supollo que no es así).
Retomando todo lo anterior, pues podría decirse que en el caso de la fecha que se aproxima, quizás ya no sea ni lo uno ni lo otro. Tal como hemos tomado ciertos modelos "nacionales" y los hemos adaptado a otros de fuera, quizás este es el caso. Muchas personas de provincia, del interior del país, siguen celebrando y conservando estas tradiciones. Y en otros lugares las mezclamos con otras y las hacemos nuestras, quizás ya sin un nombre definido. A lo mejor ya es algo demasiado comercial en algunos lugares. Y a lo mejor lo comercial ya es parte de nuestra cultura, lo queramos o no. Basta mirar a todos lados.
Por lo tanto, si te invitan a un "jalogüin" ps quizás estaría bueno ir, para divertirse, para echar relajo, sin importar tanto el nombre de la festividad. Pero a lo mejor pensar un poquito en los orígenes de lo que vemos hoy en día.
El Halloween se originó con la noche de Samhain, en Irlanda. Los celtas lo celebraban como el final de las cosechas en el año. Se dedicaban a hacer sacrificios de ganado, puesto que creían que las fronteras entre la vida y la muerte se desvanecían ese día. Hacían hogueras, donde quemaban huesos de los animales sacrificados. Y también usaban máscaras para representar a los espíritus que creían debían ahuyentar, o aplacar, para evitar que estos les dieran malas cosechas o evitar también que le hicieran daño al ganado. 31 de Octubre. De donde surgió esta fiesta en Europa. Quizás de ahí, por expansión, quiero pensar después, del Imperio Romano, algunas tradiciones por ejemplo, de Britania se llevaron a Hispania, en donde con el tiempo evolucionaría a el día de Todos los Santos.
El día de Todos los Santos y Todas las almas surge del cristianismo, donde se supone se festeja a Todos los Santos precisamente, conocidos y desconocidos, aquellos que supuestamente fueron mártires, o que alcanzaron el estado de santidad tras una revelación, sobredosis, qué sé yo. Y el día siguiente, "fieles difuntos" o Todas las Almas, pues se conmemoran a todos los espíritus de aquellos que han pasado a mejor vida. Esta tradición no pudo dejar de venir con la conquista, donde se implantó y se amalgamó con el día de los muertos, que recalco, el que se celebra actualmente no es el netamente prehispánico. Es una amalgama. Como lo que vivimos hoy en día con las tradiciones externas.
La fusión con el día de los muertos, que celebraban muchas culturas precolombinas, como Mixtecos, Zapotecos, Aztecas y hasta Mayas, persiste hasta nuestros días. La festividad de los muertos data de hace 2500 a 3000 años. Mucho más vieja que el cristianismo. Si un paisaje puede cambiar en 1000 años, una tradición con mayor razón, especialmente al estar hecha por seres efímeros y pasajeros como nosotros, los humanos. Antes ofrendas a Mictecacíhuatl; ahora, oraciones a más de una virgen de la mitología cristiana. O recolección de dulces de casa en casa.
Los cambios son inevitables. Las fusiones y el asimilar patrones externos es muy de los seres humanos. Yo ya no sé cómo se llama la fiesta. Quizás dependa del entorno. Si vas a poner tu ofrenda en tu estancia, con calaveras de azúcar, pensando en la vida después de la muerte (en realidad en el mictlán, está en tus genes), si vas a colocar veladoras para que tus difuntos no pierdan el camino de regreso, y les colocas en la ofrenda aquellos platillos que más les gustaban, o vas al panteón a dar mantenimiento a una lápida, entonces puede ser día de muertos. Si vas con tus amigos, disfrazado de...lo que sea, dispuesto a bailar, a comer, a beber, a escuchar música que hace boom boom y retumban las bocinas en todo el lugar, o si vas a acompañar a tus parientes más pequeños a pedir dulces o los ayudas a vestirse de brujita o calabaza, quizás es Halloween.
Podemos ir a los dos...¿qué nos lo impide?. Nada es para siempre. Ni las tradiciones, ni los valores, a menos que estos estén en nuestra biología (entiéndase el cuidado de los hijos, el buscar pareja y hacerle la ronda, etc...y aun así...estos desaparecerán cuando la raza humana lo haga, que tampoco somos eternos...)
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