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viernes, 14 de junio de 2013

Del baúl de mis recuerdos: Fortress

Fortress. Fortaleza. Suena a nombre de una edificación inexpugnable, pero al mismo tiempo un refugio, o quizás hasta una prisión.

Así se llamó una película de 1992 protagonizada por Christopher Lambert, en la cual lo metían preso por haber violado la ley de "un hijo por pareja". Una película que se situa en un futuro distópico, pero no voy a hablar de ella.

Voy a hablar en cambio de Fortress, una película de 1986 estelarizada por Rachel Ward, película nada futurista y quizás algo desconocida en ciertos círculos. Una película que considero de culto, vaya.

Como muchas, "basadas en hechos reales", se toma ciertas licencias para añadir drama y emoción a la experiencia de ver la película. El hecho real es el siguiente:

En el pueblo de Faraday, en 1972, en Victoria, Australia, dos sujetos armados entraron a la escuelita local, una institución rural de un solo cuarto. Secuestraron a la maestra y a sus seis alumnas y se las llevaron en una camioneta. Dejaron una nota en la escuela pidiendo una gran suma de dinero por el rescate, o si no, matarían a las alumnas y a la maestra.

El premier de Victoria aceptó pagar el rescate, y acordó con los secuestradores un punto de reunión. Iba armado, así como sus asistentes, con armas ocultas incluso en el tobillo. Pero los secuestradores no llegaron a la cita. 

Al día siguiente, los secuestradores le dijeron a la maestra que las dejarían en la camioneta solas, porque iban a recoger el dinero del rescate. Aprovechando que estaba sola con sus alumnas, la maestra pateó la puerta de la camioneta con sus botas, y logró abrirla. Era de madrugada. Escapó con sus alumnas y encontró ayuda unos kilómetros más adelante. Más tarde, se organizó una cacería por parte de las autoridades para capturar a los secuestradores, lo cual hicieron.



Y bien, ese es el hecho real en el que está basada esta película de la que voy a hablar, que a su vez también está basada en una novela basada en los hechos reales...puf...


Advertencia! Spoilers:

En una pequeña localidad rural de Australia, una maestra de escuela y dos de sus alumnos van camino al centro de enseñanza. Al llegar ahí, y disponerse, junto con los demás alumnos a comenzar su clase, uno de los niños comenta sobre la presencia extraña de unos sujetos enmascarados, tipos que vio poco antes de entrar a la escuela, rondando la zona. Con máscaras de pato, de Santa Claus, de gato y no me acuerdo qué otra, emboscan la escuela, y obligan a los alumnos y a su maestra a salir y subirse a una camioneta, permitiéndoles llevar sus cosas.



Hay alumnos de todas las edades, desde niños a adolescentes, porque, como es una escuela rural, todos los grados están revueltos en el mismo salón. La maestra, Sally, decide hacer todo lo posible para que no lastimen a sus pupilos.


Los secuestradores los llevan a una caverna en donde los mantendrán hasta que puedan cobrar el rescate. Mientras, los amenazan, e insinuan que violarán a la maestra y a una de las alumnas, la más crecida de todas, que está en esa línea entre niña y mujer, y es evidente por las formas de su cuerpo. 



Los secuestradores, pasado un rato, colocan una piedra en la pequeña entrada de la cueva. Sally deduce que, si pusieron la piedra, es porque no estarán ahí un tiempo. Así que aprovechan para explorar más su entorno y descubren que no es una pequeña cueva después de todo, sino todo un complejo de cavernas subterráneas, de las cuales al parecer, los secuestradores no tienen idea. Pero no toman una acción inmediata de escape. Los niños están cansados, asustados.

Los secuestradores regresan y la maestra les dice que los niños necesitan comer. Así que los secuestradores trepan a todos de nuevo en la camioneta y llegan a la casa de unos ancianos, a los que, a punta de escopeta, les exigen comida. Pero no precisamente para los niños, al principio. Los maleantes comen primero, y después la maestra Sally con sus niños.

Antes de irse, para que no haya testigos, los secuestradores matan a los ancianos. A Sally le pesa ello, pues fue ella quien pidió a los secuestradores lo de la comida. Los regresan a la caverna y más tarde vuelven a colocar la piedra. De nuevo están solos. 

Sally decide que es tiempo de escapar, así que lleva a todos sus alumnos a un lago subterráneo que antes habían visto, donde hay un gran muro de piedra, el cual ella, deduce, los llevará al otro lado del complejo de cuevas. Para pasar del otro lado, y estar secos y listos para emprender la huída, deben quitarse la ropa, al menos la de arriba, la interior no. Así lo hacen y pasan con la maestra casi de a uno por uno al otro lado, nadando por debajo del muro de roca. El último niño en pasar, casi un adolescente, guarda toda la ropa de los demás en su maleta para que no se moje.



 Pasados del otro lado, y aparentemente a salvo, deciden ahora sí escapar. Pero los secuestradores se dan cuenta y comienzan una cacería contra ellos, hiriendo en la persecución a dos de los niños.

Encuentran otra cueva, que deciden será su refugio, e improvisan trampas y armas con utensilios escolares como navajas y otros objetos filosos. Sally decide que es hora de, en vez de escapar, sobrevivir y no dejarse de los secuestradores. No quiere cometer más errores, o que haya más víctimas.

Maestra y niños juegan al cazador también, ahora. Y uno a uno van eliminando a los secuestradores, el penúltimo se enfrenta casi cuerpo a cuerpo con la maestra, quien es ayudada cuando los niños dejan caer un alud de rocas sobre el sujeto. El alud falla, pero permite a la maestra asestarle un golpe de gracia con una lanceta hecha de un palito y una navaja. 

Los niños y Sally ya han vivido demasiadas amenazas, tortura psicológica y persecución, sin mencionar heridas de bala. Su inocencia en ese aspecto les ha sido arrebatada. Así que preparan su fortaleza, la cueva, con más trampas. Armados con sus lanzas y piedras esperan. Y el último de los secuestradores, al ver el cuerpo del penúltimo, se abalanza con odio hacia la cueva donde ve fuego, entra a la cueva con un grito y con su escopeta, y... 

En esta parte hay dos versiones diferentes: la que yo recuerdo y la que ví hace poco. En Brasil, al parecer, editaron esta parte para acentuar más el drama y el impacto de lo que sigue. Y me gusta más esa versión.



Porque no se ve inmediatamente lo que sucede entre el secuestrador y Sally con sus niños. En la edición brasileña, la escena se corta a una plácida clase al aire libre. Sally les lee un cuento a los niños, y de repente aparece un detective con un policía. Viene a indagar sobre la investigación acerca del secuestro, ya que hay cosas que no concuerdan con la declaración de Sally y los niños, en relación a lo que han encontrado. Le piden que hable con ellos en privado, pero ella se rehúsa, pues dice que los niños ya lo vivieron y lo pueden escuchar todo sin problemas. 

De todas formas, los agentes la convencen de entrar al aula. Le dicen que en uno de los cadáveres encontraron no pruebas de haberlo matado en defensa propia, sino una brutal mutilación, hecha con mucho sadismo. La maestra les dice que, como ellos mencionan, no son pruebas concluyentes. Que dada la descomposición del cadáver y los animales que ahí habitan, ese es el estado en que lo dejó la naturaleza. Y que los niños ya han pasado por mucho. Pero antes de esto, en esta edición brasileña, al mencionar lo de la mutilación, Sally tiene un flashback: El secuestrador entrando a la cueva y tropezándose con una cuerda puesta a propósito, cayendo sobre la fogata, quemándose. La escopeta se dispara, pero da contra la roca; los niños y Sally saltan sobre el sujeto, y le clavan sus lanzas múltiples ocasiones. Le lanzan pedruscos a la cara y al cuerpo. Gritan con una emoción ancestral. 

Sally regresa al presente. En silencio, los niños entran al aula y toman palos a manera de lanzas. Comienzan a rodear sigilosamente a los agentes, quienes deciden que mejor ellos atarán cabos, y que los dejarán en paz. Se van. Los niños ríen, se sientan en sus pupitres para guardar sus cosas. Sally se despide de ellos, y cada quien emprende su camino.

La cámara hace un close-up a una repisa donde tienen animales en formol, nada raro en una escuela. Pero se acerca más y más a un frasco donde se aprecia un corazón...humano.

Como decía, en la edición brasileña hacen ese cambio de escena a manera de flashback para añadir suspenso a, ¿qué pasó con el último secuestrador? En la versión original, esa secuencia no se ve cortada. Y le quita emoción.

Fin de Spoilers, y en fin, es una película que en cierto modo me marcó. La ví cuando era niño y yo estaba acostumbrado a que, si en una peli aparecían niños como protagonistas, o era de risa o era una de esas películas "bonitas" que pululan por doquier. Me hizo ver que tramas hay muchas y muy complejas. Y que los niños son tan vulnerables en ciertas situaciones, pero pueden actuar de una forma también cruel y salvaje, aunque sea en defensa propia. Y que pueden adquirir un coraje y fuerza cuando lo hacen en equipo. 

Así mismo, después de eso, ¿siguen siendo niños? Me refiero a un estado mental, A un estado social, al perder la inocencia al matar, incluso.



Un elemento de la trama es la niña más grande del grupo, Narelle (interpretada por Rebecca Rigg), y lo que conlleva que es un escalón en el crecimiento emocional, el ver que ya no se es más un niño y que quizás se siente esa no-pertenencia al grupo en el que se está. Es una adolescente ya, y los secuestradores hacen comentarios remarcadamente morbosos para con ella. Está en un punto en el que no sabe si aún es niña, pero tampoco puede calificarse como mujer. De hecho, en la escena donde se están quitando la ropa para nadar, todas las demás niñas lo hacen con el pecho descubierto, sin problemas; ella está a punto de quitarse la parte de arriba de su ropa interior, pero lo duda. No lo hace. Es consciente, en esa situación, de su evidente diferencia con respecto a los demás niños, además, si se me permite decirlo, es MUY evidente y siendo un escuincle no podía dejar de pensar en esa escena cuando está a punto de quitarse su top, o cuando ya estaba en ropa interior y se notan todas sus formas. Más tomando en cuenta que, a pesar de hacer un papel de "niña", en aquel entonces Rigg ya tenía 19 añotes. Me inquietó en ese aspecto en aquel entonces.Como que a mí, en aquel entonces, también medio me "despertó", IYNWIM.

Quizás tiene elementos de Los Goonies (sin el humor) y de El Señor de Las Moscas (sin niños matándose entre ellos). En el segundo caso, es la supervivencia, el regreso, por momentos, a una etapa previa a la civilización. A momentos donde la adrenalina se impone a las neuronas. Donde, o te mueres tú o me muero yo, pero no me atraparás ni me harás daño.

El sentido del trofeo. Del trabajo en equipo. Y en gran, muy gran parte, la fuerza de la mujer, que sale a flote cuando ve a seres vulnerables a punto de ser vulnerados, y ella no lo permite.

No encontrarán, quizás, esta película en algún Blockbuster, ya que fue hecha exclusivamente para televisión. Pero en internet, ya saben...bajo su responsabilidad.

Gracias a esta película, ver El Señor de las Moscas más adelante ya no fue tan cañón. Y en parte la inocencia, la idea de que los niños solo viven cosas "bonitas" por el hecho de ser niños, se me derrumbó en aquel entonces. Digo en parte porque esta película fue otro de los elementos que me lo hizo ver. Otra cosa que me hacía evidente el hecho de que no por ser niño se es feliz fueron mis propias vivencias no tan afortunadas. No soy cinéfilo, pero tengo, como ven, una pequeña selección de películas de culto.

Fortress. Una película que pueden ver incluso en YouTube, subtitulada, véanla antes de que la quiten:




Que la Gorda los acompañe...

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